Aprendiendo a usar la tierra como material de construcción

Debo admitir que mientras más investigaba más impresionado estaba de las posibilidades de la tierra como material de construcción, con todas sus ventajas técnicas, de salud y medioambientales más su belleza y versatilidad estética.

Pero hasta ese momento todo era teoría y entendí que era necesario utilizar el material, sentirlo, para comprender mejor todas sus características, confirmar las ventajas y reconocer sus desafíos.

Es por eso que el año 2013 decidí capacitarme, aunque sea de manera introductoria, en la construcción con tierra. En ese tiempo me resultó más difícil encontrar opciones viables. Existían pocos centros de formación que ofrecieran este tipo de cursos y que coincidieran con mis posibilidades de tiempo, cercanía y presupuesto.

Al final, después de mucho buscar, pensar y reflexionar, me decidí por participar en un curso que ofrecía la Ecovilla Gaia, parte del Instituto Argentino de Bioconstrucción.

Puedes encontrar más información sobre ellos en este link.

Curso construcción con tierra, Ecovilla Gaia, Argentina

Tomar este curso fue una gran experiencia. El servicio que me ofreció la Ecovilla fue muy bueno, desde la inscripción, las posibilidades de alojamiento y alimentación, pero sobre todo todo el conocimiento que nos compartió uno de sus fundadores: Gustavo Ramírez.

Él demostró tener mucha experiencia en la técnica del Modelado Directo (que luego descubrí que muchos le llaman cob, nombre que se usa en Inglaterra), y esa experiencia viene de construir casi todas las edificaciones de la Ecovilla: los salones comunales, las casas y otros espacios. Además el curso era completamente práctico. Lo que Gustavo nos expuso en teoría y fotos, luego lo aplicamos en las construcciones que estaban haciendo dentro del plan de desarrollo del terreno y también lo vivíamos en las construcciones ya terminadas y en pleno uso.

Además pude compartir siete días con otras personas maravillosas. Todos querían construir sus casas con tierra y tenían ya proyectos específicos. Intercambiar ideas, preocupaciones y dudas enriqueció mucho todo lo que estábamos aprendiendo.

Fue realmente una gran experiencia y recomiendo a quien pueda hacerlo, que tome uno de estos cursos con Gustavo en la Ecovilla Gaia.

Pero aquí no solo pude experimentar la tierra directamente en la construcción, sino que también pude reconocer los desafíos y limitaciones que tienen quienes quieren usar este material.

Están por ejemplo el acceso al material, el correcto diseño de la construcción dependiendo de la técnica constructiva que se va a utilizar, lo pesado del trabajo, el tiempo que toma construir.

Volviendo a casa reflexioné mucho sobre todos estos desafíos, pero sobre todo volví con el deseo de probar los materiales locales y reflexionar sobre cómo aplicar lo aprendido en Bolivia.

Algo que puedo aconsejar a toda persona que quiera construir con tierra, sobre todo en autoconstrucción, es que tome varios cursos de capacitación, de ser posible en diferentes técnicas constructivas. Y que todo lo que aprendan lo apliquen en proyectos pequeños antes de lanzarse a construir su casa. Construyan un horno de barro, un muro de prueba, ayuden a otros en sus proyectos.

Y tengan mucha paciencia, esperen a ver cómo esos proyectos se comportan después de un tiempo, por lo menos un año. Invertir este tiempo les va a ayudar a evitar muchos errores, porque construir también está lleno de secretos que en un curso no se pueden llegar a comprender, por más experimentado y diligente que sea el formador.